11 Agosto 2024.-Personal del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM) de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México, prepararon a 50 jóvenes, en edades de entre 13 a 17 años, en diversas especialidades de búsqueda y localización de personas atrapadas en escombros y uso de extintores.
Como parte del cierre de actividades del Sexto Curso de Verano del ERUM, los pequeños se prepararon para rescatar, en un escenario simulado, a personas heridas derivado de una explosión en un laboratorio.
Para lo cual, 15 rescatistas prepararon a los pequeños en sus instalaciones ubicadas en la calle Chimalpopoca, de la colonia Centro, en la alcaldía Cuauhtémoc quienes, tras ser alertados del siniestro, pusieron a prueba sus conocimientos adquiridos a lo largo de las tres semanas que duró el curso.
Rápidamente, los adolescentes se equiparon y acudieron al lugar y al llegar, con prontitud sofocaron el incendio y comenzaron con el rescate de las víctimas que eran 11 personas, entre ellas tres menores de edad.
Siguiendo con el escenario simulado, las llevaron al triage, donde los paramédicos diagnosticaron a tres personas sin signos vitales, mientras que a los menores de edad y a cinco personas más las valoraron con quemaduras y diversas lesiones, por lo que las trasladaron a distintos hospitales.
Al término de las acciones de rescate y salvamento, los pequeños ofrecieron una conferencia de prensa donde explicaron los pormenores del evento a los demás asistentes, tal como ocurre en eventos reales, donde los paramédicos especializados y certificados del ERUM apoyan.
Durante el curso, los asistentes aprendieron sobre el uso de herramientas básicas de demolición en diferentes escenarios, sin correr ningún tipo de riesgo, a pesar de las situaciones a las que sean expuestos; así aprendieron a utilizar el casco, lentes de protección, guantes de trabajo, coderas y rodilleras y todo el equipo necesario para salvaguardar su integridad física.
Además, los adolescentes fueron capacitados para manejar herramientas básicas para realizar la detección de víctimas en estructuras y el uso de extintores para el combate de conatos de incendios.
Al finalizar, los participantes se mostraron contentos y satisfechos de haber formado parte del curso de verano, agradecieron a los instructores por sus enseñanzas y coincidieron en que, en adelante, todos ya son parte de la familia ERUM.