LA FUERZA DEL AMOR Y LA SOLIDARIDAD SUPERAN LOS ACTOS MÁS OSCUROS.
NO PERMITAMOS QUE EL ODIO Y LA VIOLENCIA NOS ROBEN LA CAPACIDAD DE AMAR Y SOÑAR CON UN FUTURO MEJOR.
“BALACEARON A TU HERMANA DIANA, HABLALE A LA AMBULANCIA…”
Eso fue lo primero que escuché en la llamada que recibí el pasado jueves 17 de octubre, alrededor de las 3 de la tarde. Hoy me dirijo a ustedes con el corazón lleno de emociones encontradas. La vida nos ha puesto a prueba de una manera que jamás imaginé.
Un intento de asesinato no solo es un acto de violencia física, sino también un ataque a nuestra paz, a nuestra seguridad y a nuestra confianza en la humanidad.
Lo anterior fue señalado por la representante popular y coordinadora de la Asociación Parlamentaria Mujeres por el Comercio Feminista e Incluyente en el Congreso de la Ciudad de México, Silvia Sánchez Barrios.
Agregó que “el fallecimiento de Víctor es una pérdida irreparable para la familia, sin duda muy doloroso para todos los que lo conocimos”.
Y aseguró que no pierden la fe en que Diana y su primo David Núñez se recuperen favorablemente. Además señaló que en estos momentos difíciles, “es crucial recordar que la fuerza del amor y la solidaridad puede superar incluso los actos más oscuros.
A pesar del dolor y el miedo que sentimos, debemos aferrarnos a la esperanza y a la convicción de que la justicia prevalecerá”.
Asimismo, reconoció “a nombre propio y de mi familia, el respaldo, el apoyo y la solidaridad que nos han dado el Gobierno de la Ciudad y el Gobierno de México y agradezco a cada uno de ustedes por su apoyo incondicional, su presencia y sus palabras de aliento lo que nos ha dado fortaleza para seguir adelante. Juntos, enfrentaremos este desafío y saldremos más fuertes y unidos”.
De sus recuerdos de lo pasado en los últimos cinco días ubico a la coordinadora del grupo parlamentario de Morena, Xóchitl Bravo y comentó “diputada, gracias por ser y estar como persona, por acompañarme en momentos tan inciertos esa noche”.
Por otro lado, también agradeció las llamadas de la Jefa de Gobierno, del Secretario de Gobierno, de las y los Titulares de las distintas Alcaldías, del apoyo de sus compañeras y compañeros legisladores, “así como de cientos de personas que estuvieron pendientes de mí y sobre todo de mi hermana Diana mostrando su amistad y solidaridad”.
En su discurso compartió su vivencia de ese ataque al decir, “la vida es frágil y preciosa. No permitamos que el odio y la violencia nos roben la capacidad de amar y de soñar con un futuro mejor. Sigamos luchando por la paz, la justicia y la dignidad de cada ser humano, de cada ciudadano en esta capital. Vivimos en tiempos donde el miedo y la incertidumbre parecen haberse convertido en compañeros constantes”.
Cada día escuchamos historias de violencia, robos y agresiones que nos hacen cuestionar la seguridad de nuestros hogares y nuestras calles.
Durante su reflexión comentó “es natural sentir miedo, pero no podemos permitir que ese miedo nos paralice. Debemos recordar que la verdadera fortaleza de una comunidad radica en su capacidad para unirse y enfrentar los desafíos juntos.
La inseguridad no solo es un problema de las autoridades es un problema de todos nosotros.
Cada uno de nosotros tiene un papel que desempeñar, podemos empezar por conocernos mejor, por cuidar unos de otros y por ser vigilantes en nuestras comunidades. La solidaridad y el apoyo son nuestras mejores armas contra la inseguridad”.
Destacó en su lectura el compromiso y auxilio de las autoridades de la Ciudad de México y del Gobierno de México ante los hechos trágicos ocurridos el pasado jueves 17 de octubre, “reconozco la labor por parte del Secretario de Seguridad ciudadana y del Fiscal de la Ciudad de México, a los cuales hago un llamado a que se refuercen y fortalezcan acciones para proteger a todos los ciudadanos de esta Ciudad. Y señalen a este Congreso, qué debemos cambiar de las leyes para su mejor aplicación.
La justicia y la seguridad son derechos fundamentales que no podemos permitir que nos sean arrebatados. Debemos alzar nuestras voces y trabajar juntos para construir un entorno más seguro para todos”.
Finalmente, agregó: “La inseguridad no define quienes somos. Somos más fuertes que el miedo y más valientes que la violencia. Juntos, podemos crear un futuro donde la paz y la seguridad sean la norma, no la excepción. Hoy es momento de cerrar filas como sociedad, es momento de sacar lo mejor de nosotros mismos como seres humanos, es momento de unirnos como congreso, es momento de crear y fortalecer más y mejores normas jurídicas y acciones proactivas.
Para que “nunca más ninguna familia sea víctima de la inseguridad”, para que “nunca más una madre, un padre, una hermana, una esposa o una hija reciba una llamada dándoles malas noticias”. Nunca más nada ni nadie por encima de la ley”.