Por Mina Moreno.
El colectivo Todos A Votar integrado en su totalidad por jóvenes en conferencia de prensa manifestaron sus mayores preocupaciones e incentivaron a la población juvenil a votar.
Dentro de las problemáticas que consideran les aquejan como jovenes son varias, tal vez por la que mayor preocupación que manifestaron fue la seguridad y la falta de incentivos para este sector, quienes conforman actualmente para una enorme población que día a día crece en México.
El movimiento #TodosAVotar busca motivar a los jóvenes a ejercer su derecho al voto, haciendo énfasis en la importancia de que su voz sea tomada en cuenta en la toma de decisiones que afectarán su futuro. Se han identificado varias áreas de interés para los jóvenes, entre ellas la calidad y acceso a la educación, la salud pública, la seguridad, el empleo y el desarrollo económico
Mario Pérez Ponce, Grissel Alfonsín Cano, Edgar Hernández Moto, María de los Ángeles Molina Amaya, Alicia Ayala Flores, Dasha Almazán, Iris Domínguez, Yulissa Magallanes, Julio Magallanes y América González, fueron los representantes de los jóvenes integrados en esta iniciativa nacional, quienes reanudaron un movimiento iniciado el año pasado en el Estado de México, compuesto por estudiantes, trabajadores, emprendedores, soñadores, dirigentes sociales, activistas. “Somos el futuro de México y es hora de que nos hagamos escuchar”, expresaron.
Uno de los puntos clave resaltados por los jóvenes es la necesidad de atención a sus demandas en materia de educación y desarrollo profesional. Desde la falta de recursos para becas hasta la precariedad en la infraestructura educativa, los estudiantes exigen soluciones tangibles para garantizar su formación académica y su inserción en el mercado laboral.
En el ámbito laboral, los jóvenes demandan políticas que incentiven el empleo y el emprendimiento. Se destaca la importancia de generar oportunidades para los jóvenes en sectores como el desarrollo tecnológico, la innovación y el emprendimiento. Existe una preocupación por la brecha entre los salarios percibidos y los costos de vida, así como la dificultad para acceder a una vivienda propia.
Además, se destacó la importancia de políticas públicas enfocadas en la seguridad y bienestar de los jóvenes. La preocupación por la violencia y la inseguridad que afecta a esta población es evidente, así como la necesidad de espacios seguros para su desarrollo integral.